Conoce los beneficios que tiene el desarrollo del área sensorial y cómo se trabaja con los niños siguiendo el Método Montessori.
En el método Montessori la educación se divide en cinco áreas de desarrollo: Vida práctica, sensorial, artes del lenguaje, matemáticas y cultura. Dedicaremos un post exclusivo para hablar sobre cada una de ellas, en esta ocasión nos centraremos en el área sensorial.
El área sensorial en el método Montessori está enfocada en el desarrollo y perfeccionamiento de los sentidos, un entrenamiento empleado para explorar el mundo y aprender sobre lo que los rodea.
Mediante la estimulación de los sentidos, los alumnos logran refinar habilidades motoras, desarrollar la coordinación, la percepción, la discriminación, la capacidad de ordenar y clasificar. Interiorizan conceptos, formas sólidas, geométricas, largo, ancho, alto, temperatura, sabor, color y más.
Área Sensorial y los sentidos según Montessori
Desde la ciencia, la educación y otros campos científicos, el número de sentidos que se le atribuyen al ser humano varían desde 5 hasta 32 y en algunos casos los simplifican en tres grandes grupos: mecánicos, químicos y lumínicos. Conforme los avances en neurociencia y el funcionamiento de nuestro cuerpo y cerebro avanzan, es más difícil incluso clasificarlos y delimitar líneas claras entre uno y otro.
Sin embargo, es posible estimular la percepción de nuestro cuerpo en relación con el entorno. Los materiales que diseño María Montessori, cubrir todas las cualidades que pueden ser percibidas por los sentidos, no han perdido su vigencia y utilidad. En cuanto a los sentidos que estimulan, se encuentran:
- Visual
- Táctil, aunque el sentido del tacto se extiende por toda la piel, los materiales y ejercicios se enfocan en la percepción con las manos, particularmente las puntas de los dedos (que dicho sea de paso, es una de las zonas con más terminaciones nerviosas del cuerpo humano) permitiendo centrar su atención en una parte de su cuerpo.
- Auditivo
- Olfativo
- Gustativo
- Estereognóstico, introducido por la Dra. Montessori, este sentido busca utilizar el sentido del tacto omitiendo el de la vista.
- Bárico, el cual distingue las relaciones presión o el peso.
- Térmico, percibe la temperatura.
Los sentidos son órganos de “prensión” de las imágenes del mundo exterior, necesarios a la inteligencia, como la mano es órgano de prensión de las cosas materiales necesarias al cuerpo.
Materiales sensoriales en un ambiente Montessori
La intención de María Montessori era que los niños pudieran formar su concepción del mundo físico a través de su propia experiencia, manipulando objetos que les ayuden para asimilar abstracciones y diferenciar las cualidades de lo que les rodea.
Siguiendo su filosofía, este conocimiento debe presentársele al niño de una forma particular, después de estudiar a fondo el trabajo de los médicos franceses Itard y Seguin sumado a su experiencia y observaciones creo materiales específicos para el desarrollo del área sensorial.
Las características de estos materiales están diseñadas para:
- Trabajar con cada uno de los sentidos por separado y luego en conjunto.
- Aíslan una única cualidad para ser trabajada, favoreciendo la concentración.
- Gracias a su patrón específico que difiere de los materiales de vida práctica, se le permite al niño darse cuenta de conceptos que ya sabe o puede descubrir, perfeccionar y ponerle un lenguaje. Por ejemplo: pesado, ligero, suave, áspero, etc. Se le conoce como “abstracciones materializadas”.
- Poseen un control de error, que permite a los niños corregirse a sí mismos.
- Son estéticamente agradables para motivar la curiosidad de exploración.
- Son limitados, es decir, en el aula solo hay una pieza de cada material para desarrollar la paciencia. También el conocimiento que se adquiere con dicho material específico es finito, pero los induce a seguir explorando bajo su propio interés.
Algunos de los materiales del área sensorial en un ambiente preparado: Cajas de colores, cilindros con botón y sin botón, cajas de sonido, campanas, cubo de binomio y de trinomio, torre rosa, gabinete de geometría y de botánica, decanomio sensorial, escalera marrón, sólidos geométricos, listones rojos, tableros de lija, tablillas de colores, tablillas rugosas, cajas de telas, bolsas y tablillas térmicas, figuras geométricas, botellas de sabores, etc.
Exploración del área sensorial por edades.
La necesidad de conocer sobre el mundo que nos rodea comienza desde el vientre materno y la necesidad de explorar desde que nacemos, por eso los tres primeros años de los niños, no pueden dejarse de lado. Para esta etapa el enfoque está en ofrecer experiencias variadas, que respondan a su curiosidad y a la tendencia del niño a explorar a través de todo su cuerpo.
Elementos con diferentes colores, formas, tamaños, olores, sabores, pesos, texturas o temperaturas se vuelven parte de la mente absorbente del niño, que tiene un potencial ilimitado y establece las bases de los procesos de pensamiento.
Si quieres aprender más visita estos post:
Contribución de los materiales Montessori en la educación
La crianza y los periodos sensibles Montessori en niños entre 1 y 3 años.
Cómo estimular al bebé según el método Montessori
En cambio, para los niños de 3 a 6 años que se encuentra transitando por un periodo caracterizado por el refinamiento de sus sentidos, el material responde a un interés natural para percibir la realidad de forma concreta, es decir, tocando. En esta etapa, el aprendizaje se da de manera inconsciente e involuntaria y esto es precisamente lo que lleva al niño a adaptarse a su ambiente.
Más allá de estimular los diferentes canales sensoriales, los materiales diseñados por la Dra. Montessori ofrecen la posibilidad de organizar la información y favorecen el desarrollo cognitivo a través de la clasificación y la seriación de forma autocorrectiva. Todo esto también se consigue si lo acompañamos con el movimiento libre en un espacio amplio, limpio, luminoso y cálido. Junto con elementos naturales como las plantas.
El trabajo con esta área, es fundamental, ya que sienta las bases incluso para aprendizajes posteriores relacionados con otras áreas educativas como el lenguaje, las matemáticas y cultura, en los cuales profundizarán de los 6 años en adelante.
¿Te animas a impulsar a tu hijo en la exploración de sus sentidos?