NUESTRA INSTITUCIÓN

La Escuela Millaray Montessori de Puerto Vallarta cree en la naturaleza del ser humano, en su esencia, en la dimensión universal que compartimos todos los seres humanos de todas las épocas, de todos los idiomas, culturas, religiones, ideologías.

Desde estas bases nos acercamos a cada persona que integra nuestra comunidad para proporcionarles las condiciones adecuadas para su desarrollo. Pues es el tono humano, lo que impregna cada una de sus actividades, lo que al final del proceso educativo, deja una huella más significativa.

¿Por qué educar a nuestros hijos con el Método Montessori?

¿Por qué la Escuela Millaray Montessori de Puerto Vallarta?

Reforzamos en todo momento valores universales: el respeto, la responsabilidad, la lealtad, la honestidad y libertad.

El ideal que mueve a Millaray Montessori es el de formar niños preparados, conscientes, independientes y con alegría de vivir. El lograr una verdadera comunidad en donde se dé la comunicación, el trabajo en equipo y el respeto a las personas. El lograr una integración entre casa y escuela que conduzca al desarrollo integral y así dejar huella en nuestra sociedad y en el mundo.

► Misión y Objetivos

Formar una comunidad educativa de vanguardia cuyo personal docente y directivo esté en constante capacitación, y comprometido con una filosofía humanista que contribuya a la transformación de la sociedad a través de la atención a las necesidades intelectuales y sociales de niños y niñas que cursan la educación básica. Promover y fortalecer en los alumnos la adquisición de conocimientos, el desarrollo de habilidades, actitudes y valores que favorezcan la libertad, la creatividad, la responsabilidad, el amor a sí mismos y hacia el entorno, con el fin de propiciar su integración a la familia, a la escuela y a la comunidad de la que forman parte.

► Visión

El sistema Montessori favorece el desarrollo de seres humanos con un entendimiento real del significado del trabajo, de la satisfacción que éste brinda y con un amor por aprender que durará toda la vida. Para vivir aprendiendo.